CAFÉ

 

El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Hay personas que no arrancan su día sin él.  Su consumo tiene muchos beneficios que te sorprenderán, aunque también tiene efectos perjudiciales. Lee y aprende sobre esta bebida energizante, para muchos indispensable.


Es una bebida que aparte de estimulante, nos aporta gran cantidad de antioxidantes,  minerales, como potasio, magnesio, manganeso, y vitaminas del grupo B.


PROPIEDADES


Su propiedad más conocida es su efecto energizante, nos hace despertarnos y nos llena de energía. Nos ayuda a concentrarnos y a mejorar nuestra atención. Mejora las funciones cerebrales, el humor y eleva los niveles de energía.


Aumenta la epinefrina en sangre por lo que mejora el rendimiento físico.


Diversos estudios demuestran la capacidad del café para promover la quema de grasas y acelerar el metabolismo.


Estudios demuestran que su consumo moderado, reduce el riesgo de padecer diabetes tipo II, así como párkinson o alzhéimer.


Su consumo reduce el riesgo de padecer enfermedades hepáticas, cirrosis  y cáncer de hígado, según algunos estudios.


Es buena para pacientes asmáticos, ya que produce dilatación de los bronquios.


Actúa sobe los neurotransmisores liberando endorfinas que hacen que mejore el estado de ánimo, por ello recomendable en depresión.


Al producir dilatación de los vasos cerebrales es recomendable en personas que padecen de procesos migrañosos, relacionados con esta causa.


El café es un potente antioxidante, consumido en poca cantidad nos protege frente al envejecimiento prematuro.


Por otro lado, su consumo regular, no en exceso, según numerosos estudios protege frente a enfermedades cardiovasculares.

 

CONTRAINDICACIONES Y EFECTOS ADVERSOS DEL CAFE


El café como estimulante del sistema nervioso simpático estaría contraindicado en pacientes hipertensos, aunque algunos estudios digan lo contrario, la cafeína tiene un efecto vasoconstrictor, por lo que hasta que no hay a más relevancia deberían de evitar su consumo.


Por otro lado, como estimulante del sistema nervioso,  puede tener como efecto colateral nerviosismo o insomnio. Para evitarlo debemos tener en cuenta el fin curativo para que tomemos el café,  tomarlo en las mañanas, para beneficiarnos de ese efecto energizante y el resto de propiedades, sin el efecto colateral del posible insomnio.


También al consumirlo de forma descafeinada obtendríamos todos sus beneficios sin los inconvenientes de ésta, aunque hay que decir que una porción de cafeína, no es eliminada por completo.


Uno de sus mayores inconvenientes es que genera dependencia, por ello si somos grandes consumidores de café el dejarlo nos costará mucho esfuerzo.


Es irritante de las mucosas gastrointestinales, por lo que a nivel estomacal personas afectadas de ulcera no sería recomendable su consumo, así como en gastritis, o procesos que cursen con infamación de mucosas como SII. Este efecto irritante tendrá un efecto laxante por lo que perderemos gran cantidad de nutrientes y minerales que verán afectada su absorción.


Puede interferir en la absorción de calcio y el hierro, por ello puede predisponer a anemias, u osteoporosis en consumos abusivos.


Existen estudios que demuestran la relación entre el consumo de café, los abortos espontáneos, el parto prematuro, y el bajo peso al nacer, por lo que no es recomendable su uso en embarazo, así como en la lactancia.

 

Como conclusión su uso en general debe ser moderado, y si tienes alguna de estas patologías o predisposiciones a sus efectos adversos deberías evitarlo. Todo dependerá de cada caso en particular y de los efectos que se deseen obtener de él, y ante cualquier duda consultar con nuestro profesional de la salud.

 

© Nerea de la Torre

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